Guillermo González Cervantes, Ignacio Sánchez Cohen, Eduardo Chávez Ramírez, José Luís González Barrios, Investigadores del INIFAP CENID-RASPA apartado postal 41,35150 Cd. Lerdo Durango, gonzalez.guillermo@inifap.gob.mx
La redistribución del agua en el suelo se realiza por los espacios vacíos (porosidad); de ahí que la organización y características de estos espacios condicionen el transporte y retención del agua, para posteriormente ser aprovechados por las plantas y / o alimentar a los mantos acuíferos. Un parámetro hidrodinámico como la conductividad hidráulica a saturación depende en gran medida de la abundancia relativa y de la distribución espacial de los vacíos existentes en el suelo; la descripción de estos espacios considerando sólo su volumen generalmente no es suficiente para explicar la dinámica que sigue el agua en el suelo (Hallaire et al., 1997), por lo que la caracterización del espacio poroso basado en los caminos de circulación preferencial del agua, puede ser descrita y cuantificada a partir de tres criterios morfológicos: tamaño, forma y continuidad de los poros y sus variaciones en el perfil. Esto puede realizarse a través de técnicas de análisis de imágenes, procedimiento que cuenta ya con un importante desarrollo en el estudio de la porosidad de los suelos
Por lo anterior, el tratamiento de imagen se utilizo para describir la dinámica del agua en una cuenca del norte del país a partir del análisis de la porosidad del suelo. Para ello se seleccionaron horizontes o capas representativas y se obtuvieron monolitos de suelo no alterado, en el laboratorio se determinó la conductividad hidráulica a saturación, enseguida los monolitos se sometieron a una segunda percolación en saturación a través de una agua adicionada de azul de metileno, para colorear los poros funcionales, después se impregnaron con una resina de poliéster y de un pigmento fluorescente. La porosidad se caracterizo a partir de tres parámetros el tamaño, forma y continuidad de los poros. Concluyéndose que los horizontes con permeabilidad baja presentan poros pequeños (< 0.53 mm2) y redondos que funcionan individualmente al transporte hídrico. Por el contrario los horizontes permeables presentan poros medianos (de 0.53 a 1.58 mm2) y grandes (>1.58 mm2), con mejor funcionamiento hídrico debido a la forma de los poros (alargada e irregular) y a la continuidad que existe entre ellos.
Líneas de investigación: hidrologia superficial, uso y manejo del agua.
19 may 2009
Guillermo González Cervantes
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